Innovación para principiantes, innovación para todos. Por una cultura de la innovación

Innovar por aquí, innovar por allá… y tú, ¿sabes qué es innovar? Innovar es una palabra cada vez más utilizada en las conversaciones organizacionales, comerciales, de mercado, académicas… en todos lados, y estoy segura de que ya te habrás dado cuenta de ello. En este contexto es fácil asumir que todos entendemos lo mismo por innovación… pero ¿te has preguntado en algún momento qué significa innovar? De acuerdo con la teoría de la innovación disruptiva de Clayton Christensen, la innovación ocurre cuando se generan nuevas maneras de proveer un producto o servicio más simple, a un mercado más amplio de personas a un precio mucho más accesible. En otras palabras, la verdadera innovación debe ofrecer: • SIMPLICIDAD: con una usabilidad más efectiva para el logro de las ventajas que ofrece. • CALIDAD: un mejor producto, servicio o experiencia. • ACCESIBILIDAD: a un menor costo. • VALOR AGREGADO: tener un diferenciador claro que haga que los clientes quieran pagar por ello. • ESCALABILIDAD: que se refiere a la posibilidad real de incrementar la eficiencia del producto/servicio a medida que se suman clientes, reduciendo así el costo por beneficiario; en otras palabras se refiere a que a mayor cantidad de usuarios o clientes, el costo por usuario es menor. • REPLICABILIDAD: es la habilidad del producto/servicio de poderse implementar en contextos diversos; a mayor capacidad de replicarse, mayor facilidad para retomar el mismo modelo y aplicarlo con otros clientes y otras problemáticas. Alcanzar soluciones con estas características no es un proceso sencillo. Sin embargo, siguiendo los pasos adecuados es perfectamente alcanzable para cualquier organización. En este sentido y como punto de partida, es importante tener en cuenta los siguientes puntos: 1. La innovación no es un esfuerzo individual, es una construcción colaborativa, es decir, es trabajo en equipo. 2. Una buena idea no es suficiente para innovar, la innovación requiere sistematización, tiempo, esfuerzo y disciplina. 3. La innovación no puede surgir de la moda, debe sustentarse en datos sólidos y ser guiada por la creatividad y la búsqueda clara de valor agregado. Pero, lo más importante: con una mente abierta y curiosa, buscando información constante, aprendiendo de los demás y comunicándonos adecuadamente, todos y cada uno de nosotros podemos tomar parte en los esfuerzos de innovación.